Luego de que Javier Ruiz, el ex árbitro que ejerció el referato durante 18 años, hasta diciembre de 2010, denunciara en una entrevista al diario “Libre” que en el fútbol argentino los réferis “reciben coimas” y que se compran “partidos y campeonatos” desde la Cámara de Diputados anunciaron que lo citarán para que amplie sus declaraciones.
Así lo confirmó el titular de la Comisión de Deportes de la Cámara Baja, Carlos Comi.
Ruiz dijo que los ascensos de San Martín de Tucumán (2008) como de Chacarita (2009), como el Apertura 2008 ganado por Boca, estuvieron arreglados
En el reportaje sostuvo que “hay cuatro o cinco árbitros corruptos que siguen en actividad”, y apuntó que el descenso de Rosario Central estuvo digitado.
Además, dijo que Instituto de Córdoba perdió un ascenso por no “arreglar” con los árbitros.
"Yo estaba con el representante de jugadores Brian Costa. El me pagaba una comisión a cambio de que le manejara los árbitros. Instituto de Córdoba, por medio de Costa, me pidió a mi que le manejara los árbitros. Por ejemplo, Costa me dice que tiene ocho jugadores en Instituto que valen 100 mil pesos cada uno, pero si asciende Instituto valen 1 millón de pesos cada uno. Entonces me ofreció 30 mil dólares del pase de Morales Neumann cuando lo transfirieran. Instituto, cinco fechas antes de que se le diera el ascenso, no quiso poner mas plata porque pensó que ya lo tenia en el bolsillo. ¿Que pasó, se quedó afuera de todo?", dijo en la entrevista.
Además, dijo que Rosario Central descendió por la “mano” de los réferis.
“A Central lo mandaron a la B en 2010... Por ejemplo, hubo un partido que Godoy Cruz le empató en Mendoza sobre la hora con un penal que no fue. Sesenta luquitas se llevó el árbitro”, afirmó.
Y agregó: "River está peleando el descenso porque los dirigentes anteriores pedían árbitros y no cumplían, había dos dirigentes de mucho peso que no cumplían y como no pagaban se corrió la bola y los mataron".
"Si no pagas son capaces de no dejarte pasar el medio campo, los arbitros se pasan la bola entre ellos y fuiste", agregó. "En un River-Boca uno de los dirigentes de River ofreció 80 mil dólares, pero no le creímos".
Por último, aseguró que Grondona está al tanto de sus dichos, pero que no “hizo mucho para revertir la situación”.
"En cuatro años se puso cinco negocios, tiene una franquicia de 100 mil dólares, una cupé BMW de 70 mil y un futuro hecho, y encima ahora se preocupa por lavar su imagen. No entiendo por qué Grondona lo banca a Lunati".
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